Un grupo de adolescentes de esta ciudad volcó el lunes 26 de febrero a bordo de una camioneta Totoya Hillux cuando regresaba tras haber pasado unas horas en una zona conocida como “el arbolito”, a la orilla del Rio Colorado, adonde había ido a escuchar música e ingerir bebidas alcohólicas.

Producto del vuelco, dos chicas debieron ser trasladadas al hospital donde quedaron internadas en observación aunque en principio no revestían gravedad en las lesiones ocasionadas en el siniestro.

Las primeras informaciones fueron brindadas por la jefatura de Bomberos Voluntarios que daba cuenta de que entre 6 a 8 ocupantes se movilizaban en el vehículo que terminó con las cuatro ruedas hacia arriba y el techo sobre el piso.

“Era un grupo de entre 6 u 8 personas que estaban en los alrededores, presentaban aliento etílico y se pudo observar en el lugar un equipo de música”, sostuvo el jefe de bomberos voluntarios al diario LM Neuquén.

Pero, en contrapartida, el parte policial da cuenta de que solamente dos personas se movilizaban en el vehículo y al consultar por las chicas que ingresaron al nosocomio, dijeron desconocer esa situación.

Según las primeras averiguaciones el vehículo era conducido por el hijo menor de un reconocido comerciante de esta localidad, quien estuvo en el operativo donde se puso sobre ruedas la camioneta y quien manifestó su decepción como padre ante esta penosa situación.