El hecho se produjo el pasado martes 1 de mayo a la medianoche, sobre la calle Perón, entre Irigoyen y Misiones, cuando la camioneta Mercedez Benz, tipo Sprinter, quedó incrustada contra el caño de 4 pulgadas que sirve de sostén para el cartel de una regalería.

El vehículo fue identificado como propiedad de un reconocido miembro de la comunidad boliviana dedicado a diferentes actividades comerciales.

Dada la alta velocidad a la que viajaba su conductor, la camioneta rompió un cantero de ladrillos que estaba sobre la vereda y detuvo su marcha al impactar contra el poste, a sólo un metro y medio de la vidriera del comercio.

En un operativo conjunto, policías y bomberos pudieron retirar la camioneta para trasladarla hasta la Comisaría 35, de esta ciudad.

“Al momento del arribo del personal policial no había nadie en el interior de la camioneta, ni tampoco en las inmediaciones”, manifestaron fuentes policiales al diario La Mañana de Neuquén.

Los uniformados indicaron que se pudo establecer que la camioneta es propiedad de un conocido comerciante de la comunidad boliviana, aunque todavía no se sabía quién conducía el vehículo al momento del impacto.

Desde el cuartel de Bomberos Voluntarios, se aseguró que “en el interior del vehículo quedó registrado un terrible golpe, aparentemente con la cabeza del conductor, que rompió el parabrisas, dejando restos de sangre y pelo”.

De acuerdo a lo que se pudo observar en el lugar, se indicó que uno de los airbag, el que estaba en la zona del acompañante se accionó, pero no así el del conductor según lo observaron los testigos.

Fuente: La Mañana de Neuquén