Una vez consumado el pitazo final del italiano Nicola Rizzoli, que decretó el triunfo ajustado de Alemania (1-0) en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, la gente se volcó a festejar en la vía pública, más allá del resultado.

Pese a la derrota en la final de la Copa del Mundo Brasil 2014, los rinconenses se acercaron a la Plaza San Martín a mostrar su agradecimiento con un equipo que dejó todo en la cancha.

Poco a poco, vecinos vestidos con camisetas de la Selección o acompañados de banderas argentinas, gorros o vuvuzelas se acercaron al centro rinconense y manifestaron su aprobación a la actuación de Argentina.

Es que no es para menos, en un equipo que se metió en el corazón de los argentinos y dejó todo en la cancha, para convertirse en el subcampeón de este Mundial Brasil 2014. (Foto: Facebook Luis Emilio González).