En una misiva enviada a este periódico el Concejal Fabián Raninqueo, ex empleado del hospital local, quien marca un compromiso constante con la entidad, nos contaba lo siguiente:
“Es mi deseo saludar a todos los trabajadores del Hospital Rincón de los Sauces y felicitarlos por el esfuerzo que ponen a diario para sostener tan importante Institución, la cual sin el recurso humano que posee, hace mucho tiempo tendría que haber cerrado sus puertas”.
“Lo que digo parece una exageración, pero no lo es, lamentablemente es la realidad que vive nuestra Institución, abandonada por el Estado Provincial, El Ministerio y Subsecretaría de Salud, quienes no se preocupan por dar las respuestas necesarias a la demanda de nuestra Comunidad”.
“En el mes de Marzo se declaró la emergencia Hospitalaria en Rincón de los Sauces, dada la situación crítica por la que atravesaba nuestro Hospital: Falta de personal médico, enfermeros, mucamas, mantenimiento, equipamiento, los centros de salud de los barrios La Falda y La Costa se cerraban, se solicitaron las viviendas institucionales para la incorporación del personal necesario, etc, etc. Tendría muchas cosas más para enumerar en cuanto a las necesidades y no habría espacio disponible para describir las mismas”.
“Por ello es que simplemente, ante tanta necesidad y falta de respuestas, quiero felicitar a todos los trabajadores del Hospital porque ellos son los que hacen que esta Institución siga funcionando”.
“Hoy frente a tanto reclamo y solicitudes que no son oídas podrían estar realizando alguna medida de fuerza para fortalecer el reclamo, más aún con mucho esfuerzo, arraigo y compromiso aportan lo mejor que tienen para continuar”.
“Tal es así que el sector choferes acaba de comprar una hidrolavadora, herramienta fundamental para la higiene y desinfección de las ambulancias luego de cada derivación. Con mucho sacrificio hicieron “La vaquita” de 2800 pesos, en cuotas y con la tarjeta de crédito de alguno de ellos la van a terminar de pagar”.
“No puedo dejar de reconocer esta actitud, que ante la falta de respuestas, obliga a los trabajadores a gestionar lo que no gestionan aquellos que tienen que hacerlo (a quien le quede el guante que se lo chante). Felicitaciones muchachos!! Estoy orgulloso de que en nuestra Ciudad haya gente como ustedes!!”