Los servicios públicos, como la electricidad, están pasando por un momento crítico, ya es raro encontrar 220 voltios en la red. Muchos aires acondicionados no prenden por la baja tensión, se queman heladeras, no falta acotar que se quemaron hasta los semáforos de la plaza principal. La situación es realmente crítica, y desde el EPEN que se maneja a control remoto desde Chos Malal parecen lejanas las soluciones.

La gente no sabe que hacer, enchufa de a ratos las heladeras, siempre con miedo a que se les queme. “Yo por lo pronto estoy instalando la trifásica para equilibrar las fases, según me informaron desde el EPEN sería lo mejor, pero el electricista me dijo que era lo mismo, ya que el problema es que no alcanza lo que entrega la red. Vamos a ver que hacemos. Encima con este calor, no se puede estar sin aire”, contaba un vecino del barrio Hipasam.

“Menos mal que hace más de 2 años que no instalan la luz acá en el parque industrial 3, sino hubiera explotado todo”, nos decía un vecino en tono jocoso, y continuaba diciendo “Yo hace más de 2 años que espero que me coloquen la luz, no se que hacer, estoy con un generador eléctrico, y de a raros enchufo la heladera, así no puedo seguir, no solo por lo que gasto de combustible, sino que no puedo desarrollar bien mi actividad por falta de energía eléctrica. Es una situación realmente complicada, el municipio nos entregó los lotes sin servicios y el EPEN no se hace cargo”.

El gas, es responsabilidad de Hidenesa, una empresa provincial, que con su reducido personal intentan hacer frente a las constantes solicitudes, pero se denota la falta de inversión. Desde provincia no se vislumbran proyectos para solucionar la baja presión que hay en el invierno.

Parece que de a poco comienza a incrementarse la cantidad de gotas que salen de las canillas. Desde el municipio luchan día a día, según informan habitualmente, para culminar la obra hídrica. La realidad que muchos vecinos aún no pueden gozar habitualmente del vital elemento.

Las cloacas están al límite y ya está en proceso de reubicación. El basurero es una mala imagen para la ciudad, y debe ser trasladado. Faltan fondos para tantas obras necesarias, por ahora la decisión es golpear puertas en Buenos Aires.

Es obvio que Rincón de los Sauces viene creciendo a un ritmo que supera la media.-