El miércoles 27 de junio, con la declaración de tres testigos y la ausencia de varios otros, continuó la séptima jornada del juicio por el crimen de Fernanda Pereyra.

En la audiencia, declaró un hombre por parte de la querella que apuntó a Castillo y Diego Marillan como quienes le vendían cocaína en Rincón de los Sauces.

A diferencia de las audiencias anteriores, la del miércoles apenas duró tres horas. En ese lapso se presentaron el último testigo por parte de la querella y dos por la defensa de Osvaldo Castillo y Andrea Peruca, quienes junto con Luciano Hernández y los hermanos Diego y Fabio Marillan están acusados por el crimen de la joven embarazada de siete meses.

“Nos conocemos todos, no hay nadie más que haya tenido algo como para hacerle daño a Fernanda, solamente Diego, Osvaldo y Luciano. Desde el primer momento supe que habían sido ellos”, declaró un hombre oriundo de la localidad petrolera que reconoció consumir cocaína a diario y haber hecho “negocios de droga” con Osvaldo Castillo y Diego Marillan.

El hombre recordó haber conocido a Fernanda en el pool donde ella trabajaba y que le compró droga en alguna ocasión. “Tuve problemas con Diego Marillan por un problema de drogas, él vendía en Rincón y yo también. Osvaldo me sirvió de intermediario para solucionarlo”, explicó el testigo, y agregó que una noche visitó la casa de Castillo donde el acusado puso droga en un plato para que consumieran juntos.

También sostuvo que un conocido suyo trabajaba para Hernández en la pinturería y le comentó que el 21 de julio el acusado le pidió que lavara la Renault Kangoo. “Me dijo que no vio nada raro pero la tuvo que limpiar mucho”, recordó. (Foto: Twitter Oficina Judicial Penal).