Desde el área de Salud Mental del Hospital Carlos Fuentes, informaron que relanzarán la huerta comunitaria en el 2016.

Para ello, solicitan la colaboración de la comunidad en la donación de herramientas como palas, azada o rastrillos.

También necesitan materiales como postes, alambres y medias sombra para reconstruir la huerta, un dispositivo de trabajo que ha dado excelentes resultados en la localidad.

Las huertas comunitarias y protegidas permiten generar espacios para crear lazos y recuperar vínculos entre vecinos y familiares. En la provincia de Neuquén se vienen desarrollando Huertas Protegidas Terapéuticas entendidas como unidades productivas para el desarrollo comunitario enfocadas en la prevención, rehabilitación y promoción de la salud integral.

Esta experiencia permite desarrollar una propuesta terapéuticoproductiva que articula entre el programa PRODA y el Hospital, a través de su Servicio de Salud Mental.

La huerta es un espacio comunitario ubicada en el marco de la salud mental, visto como un espacio de rehabilitación social, con el objetivo de recuperar vínculos y lazos con nuestros pacientes.

Cuando se los convoca a la huerta se les pide que concurran con sus familiares. La idea es que sea un espacio familiar y comunitario, un espacio saludable.

Además, es un espacio productivo, porque todo lo que se produce es para consumo de la persona que trabaja la tierra y es a su vez un espacio social porque se fortalecen los vínculos entre la gente, se recuperan lazos que es lo que más se daña en las enfermedades de salud mental.

La huerta cumple una función muy fuerte en el aspecto social, revincula el aspecto familiar y revincula el aspecto social con otros.