El pasado viernes 18 de abril, la zona del alto de la ciudad estuvo muy transitada por vehículos de la Policía local y ambulancia. Según se supo horas más tardes una mujer identificada como Lujan quedaba detenida por apuñalar en el estómago a su pareja.
Según señalaron fuentes policiales, “la señora regresa a la casa y ve algo raro”, eso raro confirman otras fuentes consultadas, es a su pareja, Luis Ferrada, subiéndose los pantalones y a su pequeña de 11 años en un rincón de la habitación con la ropa desacomodada. A lo cual le grita “que hiciste”, “como pudiste hacer eso”. Seguidamente habría corrido a la cocina y tomando un cuchillo tramontina se abalanza sobre Ferrada incrustando el elemento en su parte abdominal.
A partir de allí, el hombre de unos 40 años de edad es trasladado de urgencia hasta la Clínica de Petroleros donde se le practica una intervención quirúrgica, pero el derrame de sangre es permanente.
Allí mismo toma intervención la Policía local, quien traslada a la mujer, hacia la Comisaría 35 de esta localidad. Por otro lado, las dos nenas menores de la pareja son contenidas por la Dirección de Familia de la Municipalidad y trasladadas a Neuquén para ser examinadas a fin de constatar lesiones de tipo sexual.
Hasta ese momento la mujer quien habría reaccionado bajo emoción violenta, estaba acusada de Lesiones Graves. La situación se complica días después cuando Ferrada muere luego de ser trasladado a un nosocomio de la capital. A partir de allí la carátula de la causa pasa a ser considerada como Homicidio Simple, con una pena prevista de 8 a 25 años de prisión.
Por otro lado, desde el hospital de Neuquén constataron abusos reiterados en la menor y se espera el resultado de las pruebas de ADN para determinar fehacientemente si se trata de abuso por parte esta persona que perdió la vida. Las pruebas practicadas estarán listas para los primeros días de mayo y puede ser la puerta de salida de Lujan quien continuará a disposición del Juzgado de Instrucción 4 a cargo del doctor Cristian Piana.
A su vez, en la localidad ya comenzaron a trabajar un grupo principalmente de mujeres para solicitar la liberación de Luján, quien considera que actuó como cualquier madre lo hubiera hecho.