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El CPEM 24 cumplió sus bodas de plata

La escuela secundaria de la localidad tuvo su festejo merecido luego de cumplir un cuarto de siglo de su fundación. Se colocaron tres placas en la entrada a la institución, conmemorando la fecha. La empresa Rio Tinto se constituyó como padrino de la escuela.

El Salón de Actividades Físicas (SAF) se vistió para la ocasión. La decoración del gimnasio fue impecable, con globos de fondo que hacían de telón y en el centro un gran número 25 en referencia a los años de cumpleaños del CPEM.
El acto protocolar del que participaron algunos ex alumnos de la institución, el intendente Hugo Wernli junto a su equipo de secretarios, autoridades educativas y de Bomberos Voluntarios tuvo como inicio, el discurso del primer director de establecimiento, Luís Roldán, quien recordó los comienzos de la institución cuando Rincón era un pueblito con escasos habitantes. También hablaron otras directoras y finalizó la ronda de discursos, Elba Maldonado, actualmente a cargo de la dirección del establecimiento.
Antes la iniciación del acto, se procedió al destape de tres placas que fueron colocadas en el Hall de ingreso a la escuela. Los encargados de descubrir las placas amuradas a la pared fue el intendente, el supervisor de Rio Tinto, los secretarios de Gobierno y Hacienda, junto con los directivos actuales.
Durante el acto no faltaron las banderas de ceremonia de todas las escuelas de la ciudad y de algunas instituciones como Bomberos Voluntarios. La apertura del acto se dio con la entonación de los himnos nacional y provincial. Luego llegó el turno de la nostalgia rememorando los inicios del CFPEM y su larga historia de sus años.
Para finalizar los festejos se trasladaron al Salón de Petrobras, donde hubo una cena completa y luego llegó el turno del baile y la alegría.
Muchos fueron los que dieron rienda suelta a su algarabía hasta altas horas de la madrugada. La fiesta de la institución se trasladó a una improvisada pista de baile, concurrida principalmente por mujeres que participaron de los festejos de mayor intimidad, donde los invitados pudieron asistir.
“El desafío del CPEM es conservar su rica historia en cuanto a logros y mantener una visión abierta para mejorar la educación de nuestros jóvenes”.

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