Prácticamente recién inaugurada, y no se logra prestar un servicio adecuado. Desde que arranco ya se cambió varias veces su dirección. No es la primera vez que varios de los pacientes que son atendidos o internados en la clínica realizan su queja en el libro que se tiene a tal efecto.

La clínica tiene 20 camas de internación, de las cuales se encuentran distribuidas en 10 habitaciones, con una sola conexión para oxigeno. Si se tiene que aplicar a dos pacientes en forma simultánea no existe ningún divisor ni medio de poder brindarlo simultáneamente.

Por otro lado cuando se realizan operaciones y se utiliza anestesia, los pacientes sufren frío hasta horas luego de despertar, y es necesario para ello contar con frazadas, pero solamente poseen 2 frazadas para 20 camas.

“Es increíble, a mi marido lo tuvieron 3 días con la misma sábana, yo quise llevarle desde casa y no me dejaron. El médico se enojo, y yo le pedí que se las cambiasen pero no me dieron pelota”, nos contaba la esposa de un afiliado indignada.

Aparentemente según trascendió no poseen los elementos para atender a la gente apropiadamente, la ropa de cama no se esteriliza adecuadamente y no poseen un lavarropa moderno, sino uno a paleta. En varias ocasiones no se cuenta con jabón en polvo y tienen que rayar un pan de jabón blanco para poder lavar.

Es para destacar que uno de los mismos dirigentes petroleros que se encontraron internados en la clínica, dejaron una queja por escrito en su libro, ya que no podían creer la atención que se les había prestado.