Las cámaras empresarias citaron a la conducción del sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa para la primera semana de enero a un encuentro en el que el tema central será el pedido de un bono de emergencia para el sector.
El secretario administrativo del gremio, Marcelo Rucci, fue el encargado de dar a conocer la novedad y sostener la esperanza de los trabajadores de poder cerrar un plus salarial que reemplace al aguinaldo que este año no llegó a miles de trabajadores.
“Hay una reunión presencial programada para el 4 de enero a las 10 de la mañana”, indicó Rucci al diario "Río Negro" y detalló que “esta reunión la propusieron las cámaras así que ahí vamos a saber qué respuesta nos darán pero somos optimistas”.
La cita tiene dos particularidades que mantienen esperanzados a los dirigentes con que se podrá llegar a un resultado positivo al reclamo de un bono de emergencia de 50.000 pesos para los operarios.
Es que por un lado fue llamativo que desde las cámaras se convocara a una reunión presencial y, el cambio de modalidad podría marcar que hay un interés de las empresas en acceder al pedido de los trabajadores.
El otro punto destacado de la cita es que la misma oficiará como el debut del CEO de YPF, Sergio Affronti, en la presidencia de la Cámara de Empesas Productoras de Hidrocaburos (CEPH) la cámara que nuclea a las grandes firmas y que por primera vez es presidida por un titular de YPF.
Affronti ya mantuvo un largo encuentro con el titular de Petroleros Privados, Guillermo Pereyra, en el que dialogaron sobre el pedido de un plus de fin de año para los trabajadores que por haber permanecido suspendidos percibiendo sumas no remunerativas, este año no cobrarán aguinaldo o cobrarán solo una parte.
“Parece que hay voluntad porque ellos convocan, pero de ahí al hecho no me quiero aventurar”, indicó Rucci a la vez que aseguró que este 2020 “ha sido un año tremendo, durísimo, y esperamos arrancar un año mejor, con la actividad que gracias a Dios tiene otro movimiento”.
Cabe recordar que el sindicato contaba con 25.000 afiliados al momento del estallido de la pandemia, de ellos cerca de 20.000 quedaron suspendidos cuando se dictó la cuarentena obligatoria y aún son cerca de 5000 los que siguen en esa situación. Pero además una alta cantidad de operarios que podría superar los 2000 casos, aceptó retiros voluntarios a lo largo de este año.