El Hogar, dependiente de la Secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad de Rincón de los Sauces, tuvo que adecuar mecanismos para poder continuar con la contención y asistencia de los adultos mayores.

De un día para otro los mates, una leche caliente, la charla y mucho afecto, que conformaban cotidianidad del que contiene a adultos mayores de la localidad, debió readaptarse a los nuevos tiempos impuestos por el COVID-19.
Mariel Bustillo, Subsecretaria a cargo del espacio, brindó detalles de las actividades que en medio de la pandemia, alcanzan a uno de los sectores más vulnerables en este nuevo contexto mundial.

Con fondos propios, y apoyo de comercios locales, la Municipalidad dispuso de módulos alimentarios y viandas, que personal municipal acerca a las viviendas de los adultos. También les brindan materiales para que realicen las actividades que tradicionalmente hacían en el hogar. “La denominamos caja recreativa, le damos lo necesario para que puedan encontrar en las tareas un momento de distracción” comentó Bustillo.

En su relato la funcionaria recordó los primeros días de la cuarentena obligatoria, y la dificultad para abordar la tarea con los cuidados necesarios “fue difícil al principio, tuvimos que trabajar mucho para lograr comprender juntos la importancia de cuidarlos, de cuidarnos. Extrañan los abrazos, el afecto”, se indicó desde el municipio.

Muchas de las personas que concurren al hogar, están contenidos por sus familias aunque, Mariel resaltó que “extañan el hogar, porque aquí también tienen una familia con la que comparten”. (Foto: Miguel Huentecol).