Mediante un fallo sin precedentes en la provincia, un juez civil de Rincón de los Sauces avaló el pedido de dos hermanos y les suprimió el apellido de su padre, quien se encuentra preso por haber asesinado a la mamá de los chicos, Micaela Recchini, en 2010.
La decisión fue comunicada por el juez Sebastián Andrés Villegas el jueves, en la que además de hacer lugar al pedido, ordenó que se notifique el cambio al Registro Civil y a todos los demás registros y organismos públicos correspondientes.
El pedido había sido presentado por los hermanos a través de su abogado, José Luis Miranda, tras manifestar que llevar el apellido paterno resultaba “una carga abrumadora, causándoles graves daños emocionales y psíquicos”.
“Ellos siempre quisieron e hicieron llamarse con el apellido de su mamá. Es parte de su deseo”, explicó el abogado Marcelo Hertzriken Velasco al diario LM Neuquén, quien durante el juicio representó a la familia de Micaela. La joven tenía 24 años cuando fue asesinada por su pareja, Héctor Cortez, quien actualmente se encuentra cumpliendo condena.
Si bien los hermanos dejaron de utilizar el apellido paterno, hasta este momento, en el resto de los registros oficiales seguían llevándolo. Por ello, se acudió a la Justicia Civil.
Para tomar la decisión y suprimir el apellido, el juez Villegas tuvo en cuenta el derecho a la identidad, considerado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos como “un proceso que abarca una multiplicidad de elementos y aspectos que exceden el concepto estrictamente biológico y que corresponde a la verdad personal y biográfica del ser humano”. Siendo víctimas colaterales de la violencia de género mediante el femicidio de su madre, los hermanos solicitaron llevar únicamente su apellido.
En este sentido, el juez Villegas consideró lo que habían expresado ambos anteriormente ante profesionales que los entrevistaron luego de que Cortez presentara un pedido para mantener el contacto con ellos. En esa oportunidad, tras considerar que los chicos se habían negado, el mismo juez rechazó el pedido de Cortez.
Cabe recordar que el femicidio de Micaela ocurrió el 14 de marzo de 2010 en Rincón de los Sauces. Esa mañana, Cortez la golpeó hasta causarle la muerte y, un año después, fue condenado a 23 años de prisión por homicidio simple. En su momento, no se tuvo en cuenta el agravante del vínculo porque no estaban casados -aunque convivían y tenían dos hijos- ni el de alevosía, presentado por el abogado Hertzriken Velasco.