En un operativo de rutina realizado el miércoles 8 de mayo por la mañana, dos personas jóvenes fueron identificadas por personal policial que con el apoyo de un can especializado en seguridad y detección, lograron sacar de circulación un 38 especial con varias municiones.
Las personas demoradas están vinculadas a una facción del gremio de la construcción UOCRA y se estima que el arma iba a ser utilizada para dirimir las diferencias en caso de encontrarse con el sector en disidencia.
Según relató un testigo ocasional del procedimiento, los efectivos hicieron descender del vehículo marca Fiat Siena color celeste a sus dos ocupantes, mientras el perro no paraba de ladrar mostrando que algo andaba mal.
“Creo que se llevaron un susto muy grande, los muchachos que estaban siendo requisados miraban fijamente al perro que no paraba de ladrar”, indicó el testigo ocasional de operativo.
Además comentó que “entre las pertenencias de uno de ellos había un arma de fuego” que horas más tarde fuentes policiales indicaron que “se trata de un arma de fuego calibre 38 especial y gran cantidad de municiones que fueron secuestradas”.
Las mismas fuentes indicaron que el arma incautada no poseía papeles, ni tampoco los demorados tenían permiso para portar armas de fuego, precisó la crónica municipal.
Tras el operativo quedaron demoradas las dos personas en comisaría 35, se secuestró el vehículo, el arma y las municiones enviando las actuaciones a Fiscalía.
La causa estaría caratulada como portación ilegal de arma de fuego y se abrió una investigación para establecer la finalidad con la que se movilizaban en la vía pública con este armamento.