El pasado domingo 30 de diciembre de 2018, cerca de las 9,30 horas, el vecino de Rincón José Parada fue picado en las inmediaciones de la Ciudad Deportiva por una Yarará ñata.
José, un reconocido comerciante con más de 40 años de residencia y dueño de Vidriería Parada, alcanzó a matarla y de inmediato fue trasladado al hospital de área de Rincón de los Sauces, donde, ante la falta de antídoto para esa picadura fue derivado de urgencia a Neuquén capital alrededor de las 13 horas.
El Periódico de Rincón dialogó con un integrante familiar quien explicó que en el hospital de área no contaban con suero ofídico para esa víbora y se decidió el traslado a la capital neuquina. “A las 16 horas le colocaron la dosis de antídoto y quedó internado”, aclaró.
“Por el momento, sigue en el Hospital con complicaciones en la zona renal y se espera una evolución favorable ante la picadura”, agregó el familiar consultado.
El allegado consultado por este medio lamentó que en el hospital de área no se cuenten con los insumos necesarios para atender este tipo de urgencias.
También cuestionó el silencio oficial de autoridades de Salud o del gobierno, ante el hecho ocurrido a fin de mes.
La Yarará ñata es una víbora patagónica, de color ceniciento. Es una especie mediana, de tronco grueso y deprimido y de cola angosta. Su largo promedio es de 45-75 cm, siendo las hembras significativamente más largas y más pesadas; ocasionalmente alcanza 1 m de longitud.4
Es una especie endémica de la Argentina; se la encuentra en las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Córdoba, Chubut, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Río Negro, San Juan, San Luis, Santa Cruz y Tucumán.
Es el reptil venenoso más austral del mundo, y está presente en la Patagonia septentrional, incluyendo las sierras del norte y centro de la Provincia del Chubut; se la ha hallado ocasionalmente en Santa Cruz.