La muerte de Miguel Ángel Chocala Fernández, ocurrida el 17 de agosto, en un pozo de San Patricio del Chañar reactivó el reclamo del gremio de los petroleros privados, que va a insistir ante las empresas para que se modifique el esquema de trabajo en los yacimientos porque actualmente los trabajadores pasan 14 días en el campo por siete días en sus hogares.
El titular del gremio, Guillermo Pereyra precisó el viernes 17 de agosto en declaraciones a la prensa que a raíz de este incidente en la empresa Nabors se sentarán a hablar con la cámara de empresarios para reestructurar las jornadas laborales “para que lo máximo sea 4 días por 2 de descanso o de 6 días por 3 de descanso”.
Pereyra advirtió al diario “Río Negro” que actualmente el Convenio Colectivo de Trabajo del sector no especifica la cantidad de días que pueden acumular los obreros. Si se concretan las modificaciones va a implicar “un agregado al convenio en el apartado que especifica el 2 por 1”.
Pereyra señaló que “todos los incidentes y accidentes, la gran mayoría de ellos ocurren cuando el compañero ha pasado los 10 días u 8 días en el campo, porque tienen rotación de 14 por 7 y nosotros estamos reclamando permanentemente para que se ajuste esta rotación”.
El sindicalista se mostró afligido por el episodio, aseguró que “ayer a la tarde yo estuve en Añelo y este compañero anduvo conmigo, comimos juntos. La verdad que es lamentable que estas cosas ocurran, hace pos días se mató otro compañero más (Daniel Torres), ahora tenemos todos los equipos de Nabors parados hasta que termine la investigación hasta saber si hay negligencia de la empresa y quien estaba dirigiendo la maniobra”, dijo.
Sobre las condiciones laborales de los trabajadores, aseguró que tienen equipos técnicos específicos que recorren los pozos para inspeccionar la seguridad y en ese contexto insistió con la cantidad de días que los trabajadores pasan en el campo.
Puntualizó en que los trabajadores “están alejados de su familia, la cabeza no se puede concentrar y hay muchos problemas en la sociedad. Hay compañeros que tienen sus hijos adolescentes y están pendientes a lo que pasa en sus casas. Estamos trabajando con la cámara para que se ajusten estas rotaciones”.