En otra de las jornadas por el femicidio de Fernanda Pereyra, la joven embarazada de 27 años que fuera asesinada el 20 de julio de 2017, el principal imputado, Luciano Hernández, intentó crear una coartada que lo beneficie.
“Una vez me llamó (Luciano) y me dijo que, si hablaba, diga que estaba conmigo el Día del Amigo”, sostuvo en su declaración una ex pareja de Luciano Hérnandez, quien mantuvo una relación con Fernanda y es uno de los cinco acusados por su asesinato y el de su bebé.
El testimonio de la mujer fue el último que escuchó el jurado popular el lunes 25 de junio en la quinta jornada del maratónico juicio por el brutal homicidio de Fernanda Pereyra.
Además, testificaron peritos, psiquiatras y psicólogos forenses que intervinieron en la investigación y que entrevistaron a Luciano Hernández, Osvaldo Castillo, Andrea Peruca y Diego y Fabio Marillán, los cinco acusados por el crimen de la joven en Rincón de los Sauces, ocurrido el 20 de julio de 2017.
Con la mirada fija y evitando dirigirla hacia donde estaban los acusados, la testigo relató que su relación con Hernández comenzó entre enero y febrero de 2017 y duró casi tres meses, aunque nunca dejaron de verse y de mantener comunicaciones telefónicas. “No estuve con él, yo estuve en mi casa y él no sé”, respondió la mujer respecto de dónde estaba la noche del 20 de julio, señala la crónica del diario LM Neuquén.
Ese mismo día, Fernanda Pereyra, embarazada de siete meses, fue apuñalada y luego incinerada a la vera de la Ruta 6, a 5 kilómetros de Rincón de los Sauces.
Por otra parte, un comisario que participó de las pericias en la escena del crimen detalló que el cuerpo de la joven fue hallado en una calle lateral y que las huellas de neumáticos determinaron una circulación no habitual.
De acuerdo con el efectivo, en el lugar también se encontraron, entre otros objetos, rastros de pisadas. “Nos pidieron comparar con fotos de una huella en el lugar del hecho las zapatillas que fueron secuestradas del departamento de Osvaldo Castillo”, explicó un licenciado en Criminalística.
Las zapatillas en cuestión serían las mismas que durante la audiencia del sábado 23 de junio se vieron en un video del inquilinato de Castillo, quien las llevaba puestas y luego en la mano.
“Encontré coincidencias en cuanto al diseño y tamaño con las zapatillas secuestradas, que serían de un talle 41 o 42”, indicó el perito, y agregó que hay un “alto grado de probabilidad” de que se trate de las mismas zapatillas. En este sentido, a través de fotos sostuvo que uno de los puntos clave fue que el diseño de la suela, específicamente con forma de triángulos, es similar al que se encontró en la escena del crimen.
Para este martes 26, se prevé escuchar los últimos testigos por parte del fiscal Agustín García. Luego será el turno de la querella, a cargo de Marcelo Hertzriken Velasco, y, por último, de los defensores Gustavo Palmieri (Castillo y Peruca), José Quintero (hermanos Marillán) y Martín Segovia y Juan Coto (Hernández). (Foto: Twitter Oficina Judicial Penal).