La investigación del femicidio de Fernanda Pereyra, la joven embarazada de 7 meses ocurrido el 20 de julio del 2017, incorporó en las últimas horas tres pruebas importantes para vincular a los cinco imputados.
En dos de ellas, se digitalizaron las imágenes de las cámaras de seguridad de la ciudad petrolera, y la tercera da un indicio recogido en el lugar donde la joven fue encontrada carbonizada.
El trabajo pericial le fue encomendado al licenciado en Criminalística, Enrique Prueger, quien representa a la familia Pereyra.
En primer término, Prueger digitalizó las imágenes captadas por un domo ubicado en Rincón de los Sauces y en las que, no sin dificultad, podían observarse lo que sería la camioneta de los acusados y una figura femenina huyendo.
Mediante la técnica de la digitalización, el perito logró confirmar que la camioneta Toyota Hilux negra que se ve en las imágenes es efectivamente la que secuestraron en poder de uno de los imputados. Logró confirmar que el rodado tiene el mismo ploteo lateral y la jaula antivuelco.
También pudo confirmar que la figura femenina que huyó en sentido contrario a la camioneta que la esperaba en una esquina era Fernanda Pereyra. “Certificamos que es una mujer de cabello largo y que tiene un avanzado estado de embarazo, lo que en la filmación original se veía con dificultad”, manifestó Prueger.
Finalmente también aportó otra pericia que complica a uno de los imputados, ya que una zapatilla secuestrada por la policía pertenece a Diego Marillán. Se trata de un calzado poco conocido pero cuya suela quedó estampada en el sitio donde fue quemada Fernanda.
La joven de Rincón de los Sauces fue asesinada a puñaladas el 20 de julio del año pasado. Su cadáver fue encontrado al día siguiente en la ruta 6 a 3 kilómetros del centro de la ciudad petrolera totalmente carbonizado.
Por el crimen, Luciano Hernández, Osvaldo Castillo, los hermanos Diego y Fabio Marillán y Andrea Peruca están acusados de homicidio calificado, en el caso del ex por el vínculo, con premeditación y por ser cometido por dos o más personas, mientras que a la mujer se la considera partícipe necesaria. (Foto: Archivo).