Cada 30 horas fue asesinada una mujer por violencia sexista en Argentina en 2013. Foto: Archivo
Unas 295 mujeres fueron asesinadas en Argentina en el marco de la violencia de género en 2013. Hubo un femicidio cada 30 horas. Los números son contundentes. Pero, como dice Fabiana Túñez, coordinadora general de la Asociación Civil Casa del Encuentro, no son sólo cifras: detrás de cada una de estas muertes hay una historia, una familia destruida, proyectos truncados, hijos que quedan sin madre.
Las estadísticas, que fueron presentadas el pasado jueves 6 de marzo en el Centro de Información de las Naciones Unidas para Argentina y Uruguay , provienen de un relevamiento realizado por la Casa del Encuentro a partir de información publicada por agencias y diarios nacionales.
"Quisiera estar acá para decirles que el número de femicidios de 2013 fue cero, pero lamentablemente no es así. Fue la cifra más alta de los últimos 6 años", dijo Ada Rico, co fundadora de la Asociación Civil.
Del informe se desprende que unas 83 mujeres murieron baleadas, 64 fueron apuñaladas, 37 golpeadas y 28 fallecieron tras ser estranguladas. En el 38 por ciento de los casos, los asesinos eran esposos, novios, parejas o amantes de la víctima.
La mayoría de las mujeres tenía entre 19 y 30 años al ser asesinadas, aunque también muchas de ellas estaban entre los 31 y los 50 años.
Los crímenes tuvieron lugar principalmente en la casa de la víctima o la vivienda que compartía con el asesino.
Del total de femicidios, en unos 46 casos había denuncias previas o medidas cautelares por violencia de género.
Hubo 11 víctimas que estaban embarazadas cuando fueron asesinadas y en 27 casos hubo indicio de abuso sexual. Al menos 15 de los femicidios fueron causados por miembros de las fuerzas de seguridad.
La violencia de género tiene otras víctimas además de la mujer: sus hijos. El informe de la Casa del Encuentro revela que, producto de los femicidios ocurridos en 2013, unos 400 chicos quedaron sin madre.
Túñez contó el caso de Josefina, hija de Adriana Marisel Zambrano, asesinada en Jujuy en 2008 por su ex pareja, padre de la menor. El hombre recibió una condena a 5 años de prisión por el delito de "homicidio preterintencional" y hoy está en libertad. "Esta nena está obligada a visitar a su padre, el asesino de su madre, por decisión judicial", relató Túñez.
Por ese motivo, la Casa del Encuentro redactó un proyecto de ley que plantea la supresión de la patria potestad de los hombres condenados por femicidio, así como la suspensión de la misma durante el tiempo que dura la investigación judicial de estos asesinatos.
Por otra parte, el Secretario General de la ONU envió un mensaje a todas las mujeres: "Trabajemos juntos en pro de los derechos, el empoderamiento y la igualdad de las mujeres. Las pruebas no dejan lugar a dudas: la igualdad de la mujer supone progreso para todos". (La Nación)