René Antonio Pallares, de 56 años de edad, era conocido en la ciudad por realizar tareas eventuales como instalador y fue encontrado sin vida en una habitación de una residencia de esta ciudad.

Según trascendió, el dueño del residencial, se preocupó al notar la ausencia de Pallares por varios días, por lo que dio aviso a la policía, al mismo tiempo que advirtió un olor nauseabundo dentro del inmueble.

Al llegar los uniformados, forzaron una de las ventanas y vieron el cuerpo del trabajador inmóvil en su cama. La policía constató que la puerta de la habitación estaba cerrada con llave y las ventanas con rejas, por lo que suponen se trató de una muerte sin la participación de terceros.

Pallares sería portador de hepatitis B, por lo que debió estar internado en varias oportunidades en el hospital local, razón por la que los investigadores suponen que los graves problemas hepáticos del inquilino, le habrían provocado la muerte.

El hombre no contaba con familiares en Rincón de los Sauces y la policía intentaba en contactar a personas con parentesco del occiso.