El 25 de enero de 1996 un avión de Transportes Aéreos Neuquén (TAN), según se informó oficialmente y hasta salió publicado en la tapa del diario Río Negro, aterrizó cuatro metros antes de la pista. El avión quedó despedazado e irreparable por que su tren de aterrizaje quedó destrozado así como su casco con varias roturas, su ala izquierda se quebró y la derecha también quedó bastante deteriorada.
Por suerte no hubo que contar víctimas, ya que lo que pudo haber sido una tragedia terminó solamente con daños materiales de la nave.
El avión en cuestión es un un Metro III, matrícula LV-AOR, que mágicamente, según indican los registros del aeropuerto de San Fernando, en provincia de Buenos Aires, despegó el año pasado.
Según se considera, los hechos ocurridos a la aeronave fueron irreparables y no podría estar en vuelo. Sin embargo el informe de la Fuerza Aérea deja constancia de la misma matrícula, que supuestamente tendrían que ser únicas y no pueden repetirse, y si esto ocurriera se hablaría de unidades gemelas.
Según se indica en el diario Río Negro, el avión en cuestión es un Fairchild modelo SA 227 AC-478, matrícula LV-AOR que perteneció a TAN y que, se informó, despegó del aeropuerto internacional de San Fernando y regresó en un vuelo fugaz el 9 de septiembre de 2008.
Debido a esta anormalidad es que la jueza que lleva adelante la quiebra de la empresa TAN pidió en dos ocasiones la incautación del artefacto y aún no obtuvo respuesta de la policía aeroportuaria.
En el marco de la investigación de la quiebra, la Fuerza Aérea informó a fines del año pasado que uno de los Metro de la empresa continuaba operando y que el 9 de septiembre de 2008 despegó a las 19:52 del aeropuerto de San Fernando y regresó a los pocos minutos, se indica en el oficio, "teniendo como piloto a Norberto Néstor Vinelli" y "figurando la fallida -TAN- como explotador".
Quien realizó el vuelo lo hizo a nombre de TAN, que desde el año 2000 no registra actividad, por lo que, para la Fuerza Aérea, la ex empresa estatal, privatizada en 1995, vendida dos veces y desmantelada hasta el vaciamiento, continúa operando.
La titular del juzgado de primera instancia en lo Civil, Comercial y de Minería de Neuquén, Paula Stanislavsky, libró el primer oficio el 27 de noviembre de 2008 y lo reiteró 6 de febrero.
De acuerdo a lo relatado por el diario Río Negro, “los aviones de TAN, tras la privatización realizada por el ex gobernador Jorge Sobisch en 1995, en el último año de su primera gestión, recorrieron destinos similares: vendidos o entregados como moneda de cambio en los sucesivos traspasos de acciones de la empresa, a la mayoría se les perdió el rastro. Fue por eso que la sindicatura de la quiebra pidió los informes a la Fuerza Aérea para rastrearlos e intentar recomponer las operaciones por las que TAN perdió las siete aeronaves que formaban parte de su patrimonio al momento de la privatización. Sin registros contables, las cifras de las ventas sólo constan en actas de directorio. En una de ellas figura que el empresario Ricardo Sturno le compró TAN a VASP con bienes de la misma línea aérea: dos aviones SAAB, los más importantes de la flota que entregó la provincia. En el marco de una acción de responsabilidad presentada por la sindicatura, la jueza inhibió la semana pasada los bienes del ex gobernador Sobisch y de dos funcionarios”.