El pasado sábado 19 de enero, el operario de la Planta de Bombeo de Cloacas determinó la presencia de un líquido negro que en gran cantidad estaba llegando a su lugar de trabajo. Rápidamente desde la Municipalidad se montó un operativo de limpieza con camiones denominados “chupas” para extraer el fluido y evitar que llegue a la zona de Tratamiento Cloacal. Paralelamente se montó un fuerte rastreo en lavaderos y algunas empresas que tienen manejo de petróleo, a fin de determinar la procedencia de mismo, dentro de la red cloacal que por momentos estuvo a punto de colapsar por el hecho.
Si bien las primeras inspecciones no arrojaron con los autores del desastre ocacionado, continúan las averiguaciones con el objetivo de hallar a los responsables. Incluso, el mismo intendente de la localidad, Hugo Wernli, fue el encargado de realizar la denuncia en la Comisaría 35. Al respecto el mandatario sostuvo: “es un hecho lamentable, esto perjudica a toda la sociedad y llevaremos a fondo la investigación, por eso, realizamos la denuncia para que la Policía también investigue lo sucedido”.
En diálogo con El Periódico de Rincón, el secretario de Obras Públicas, ingeniero Diego Bazar, afirmó que “fueron entre 8 mil y 9 mil los litros de hidrocarburos arrojados” y aseveró que “de no ser por la rápida intervención con los camiones chupas, hubiera sido un verdadero desastre porque nos habría roto toda la Planta de Tratamiento Cloacal”.
El hecho desafortunado tuvo trascendencia nacional y provincial, desde el lunes 21 de enero, se espera la llegada de integrantes de Defensa Civil de provincia y de Desarrollo Social del Gobierno nacional.